ESTACIONES

ESTACIONES
Texto e ilustraciones de Blexbolex
Editorial Kókinos, 2010


Este libro trata de: Estaciones del año, Naturaleza, Vida cotidiana, Tiempo, Sentimientos, Clima, Emociones,
Conocimiento del entorno.
Propuesta de clasificación documental: AZUL/83
Propuesta de signatura topográfica: AZUL/831/BLE/est

"Blexbolex se perdió entre las páginas de un libro imaginario hace ya mucho tiempo.

Necesitó un otoño, un invierno, una primavera, dos veranos, algunas tormentas y mucho sol para encontrar sus Estaciones"

Este álbum termina con esta cita, cada persona que la lea, le encontrará “su significado”, como ocurre con casi todas las lecturas. Algo parecido pasa con este libro, con este atípico libro de imágenes, destinado a personas de 3 a 99 años, pero con el que interactuarán más las lectoras y lectores un poco mayores de 3 años.

Blexbolex utiliza tintas planas superpuestas para ilustrar en cada hoja una palabra representada por un dibujo o escena gráfica. Tendremos una historia, si así lo queremos ver, pero no hay un esquema fijo, un hilo conductor, ni una relación en el orden de presentación de las imágenes; a veces las dos que aparecen al abrir el libro, una en cada página, tienen relación, otras veces no. Empieza ilustrando las estaciones, luego podríamos decir que las enlaza con palabra-imagen, pero no siempre es así.

Encima de todas las imágenes está la palabra en letras de imprenta mayúscula y de color rojo. El libro invita a jugar, ¿qué palabra crees que estará escrita arriba?, ¿cómo representarías con un dibujo la palabra…?

Es un libro que se puede solo mirar, pero la discusión y el intercambio de sentimientos, contradicciones, extrañeza y todo lo que surge en la observación de las imágenes, se favorece con una lectura en grupo.

El autor necesita doble página para representar visualmente algunas palabras como “horizonte”, “carnaval”, “poda”; cómo ilustra “embriaguez” nos sorprenderá, y otras palabras como “céfiro” puede que hagan necesario “tirar de diccionario”.

Se puede leer-mirar-interpretar repetidas veces, y casi siempre nuestros y nuestras “escuchantes” concluyen: “dibujar los sentimientos es lo máaaas difícil”.

Mirta